Manejo de la ira y la depresión navideñas

La temporada navideña a menudo trae invitados no deseados: ira y depresión navideña. Y no es de extrañar. Las festividades presentan una vertiginosa variedad de demandas: fiestas, compras, repostería, limpieza y entretenimiento, por nombrar solo algunas.

Pero con algunos consejos prácticos, puede minimizar la ira y la depresión que acompañan a las festividades. Incluso puede terminar disfrutando de las vacaciones más de lo que pensaba.

Consejos para prevenir la ira y la depresión navideña

Cuando la ira está en su apogeo, es difícil detenerse y reagruparse. En primer lugar, trate de prevenir la ira y la depresión navideñas, especialmente si las festividades le han afectado emocionalmente en el pasado.

  1. Reconoce tus sentimientos. Si alguien cercano a ti ha muerto recientemente o no puedes estar con tus seres queridos, date cuenta de que es normal sentir tristeza y dolor. Está bien tomarse un tiempo para llorar o expresar sus sentimientos. No puedes obligarte a ser feliz solo porque es la temporada navideña.
  2. Si quieres gestionar ira y depresión navideña, tenga cuidado con la cantidad de alcohol que consume porque el consumo excesivo de alcohol contribuye al conflicto y la agresión.
  3. Alcanzar. Si se siente solo o aislado, busque eventos comunitarios, religiosos u otros eventos sociales. Pueden ofrecer apoyo y compañía. Ofrecer su tiempo como voluntario para ayudar a los demás también es una buena manera de levantar el ánimo y ampliar sus amistades.
  4. Sea realista. Las vacaciones no tienen que ser perfectas o como el año pasado. A medida que las familias cambian y crecen, las tradiciones y los rituales a menudo también cambian. Elija algunos a los que aferrarse y esté abierto a crear otros nuevos. Por ejemplo, si sus hijos adultos no pueden ir a su casa, busque nuevas formas de celebrar juntos, como compartir fotos, correos electrónicos o videos.
  5. Deja de lado las diferencias. Trate de aceptar a sus familiares y amigos tal como son, incluso si no cumplen con todas sus expectativas. Deje a un lado las quejas hasta un momento más apropiado para la discusión. Y sea comprensivo si los demás se molestan o se molestan cuando algo sale mal. Lo más probable es que también sientan los efectos de la ira y la depresión navideñas.
  6. Apegarse al presupuesto. Antes de ir a comprar regalos y alimentos, decida cuánto dinero puede gastar. Entonces apégate a tu presupuesto. No intentes comprar la felicidad con una avalancha de regalos. Pruebe estas alternativas: haga una donación a una organización benéfica en nombre de alguien, dé regalos hechos en casa o inicie un intercambio de regalos familiares; esto ayuda a aliviar la ira y la depresión navideñas.
  7. Plan a seguir. Reserva días específicos para ir de compras, hornear, visitar amigos y otras actividades. Planifica tus menús y luego haz tu lista de compras. Eso ayudará a evitar la lucha de última hora para comprar ingredientes olvidados. Y asegúrese de conseguir ayuda para preparar y limpiar la fiesta.
  8. Aprende a decir no. Decir sí cuando deberías decir no puede hacerte sentir resentido y abrumado. Amigos y colegas entenderán si no puedes participar en cada proyecto o actividad. Si no es posible decir que no cuando su jefe le pide que haga horas extras, intente eliminar algo más de su agenda para recuperar el tiempo perdido.
  9. No abandones los hábitos saludables. No dejes que las vacaciones se conviertan en una batalla campal. La indulgencia excesiva solo aumenta tu ira y tu culpa. Come un refrigerio saludable antes de las fiestas navideñas para que no te excedas con los dulces, el queso o las bebidas. Continúe durmiendo lo suficiente y haciendo actividad física.
  10. Toma un respiro. Haz algo de tiempo para ti. Pasar solo 15 minutos solo, sin distracciones, puede refrescarte lo suficiente como para manejar todo lo que necesitas hacer. Da un paseo por la noche y contempla las estrellas. Escucha música relajante. Encuentre algo que reduzca la ira y la depresión navideña al despejar su mente, ralentizar su respiración y restaurar la calma interior.
  11. Busque ayuda profesional si la necesita. A pesar de sus mejores esfuerzos, es posible que se sienta persistentemente triste o ansioso, atormentado por molestias físicas, incapaz de dormir, irritable y desesperanzado e incapaz de afrontar las tareas rutinarias. Si estos sentimientos duran un tiempo, hable con su médico o con un profesional de la salud mental.

:Ira de vacaciones y depresión